LA SUERTE ESTÁ ECHADA
A menudo, antes de que una competición empiece, tengo la sensación de que much@s de l@s judokas asistentes piensan - y así lo expresan incluso abiertamente - que la suerte ya está echada. Esta expresión de origen latino se usa a modo de consuelo cuando resulta imposible modificar una situación, en especial su desenlace. En las competiciones hay l@s favorit@s que sabe que lo son, l@s que han olvidado o no se creen que lo son, l@s que no son favorit@s y se creen que lo son, l@s que no son favorit@s y saben que no lo son, y aparte de otros posibles perfiles también existen l@s que son o no favorit@s y se convencen de que no lo son y parece que hacen todo por no avanzar. Reconozco que me cuesta cada vez más escuchar ciertas frases, todas ellas acompañadas de la exclamación “¡total!”: “… mi rival es muy fuerte, la voy a volver a fastidiar, ya me ha ganado varias veces, es mejor, no me sale mi técnica…” No me molesta que se use, sino el empleo abusivo de las mismas, ya que no solo se